Hace tiempo conocí
a un señor trajeado
vendedor de libros
gran conversador apasionado.
De aire firme y elegante
señorial y educado
de buen talante, portugués
sensato y afortunado.
a un señor trajeado
vendedor de libros
gran conversador apasionado.
De aire firme y eleganteseñorial y educado
de buen talante, portugués
sensato y afortunado.
Escritor por devoción
pintor por adición
fotógrafo aficionado
aviador frustrado.
Sportinguista hasta la médula
su estación del año, otoño
amante del mar y de las gaviotas
enamorado de su ciudad, Porto.
Un cabezota soñadorun intelectual trabajador.
Su música, un fado
su color, el verde y blanco
En definitiva y como conclusión
un gran amigo, un señor
Joaquín Duarte de Silva.
5 comentarios:
ojo con lo que dices en esta entrada que te ganas una bofetada.
¿Que quieres que te diga? Si casi todo es cierto. He dicho casi ¡vale! Sin entrar en las valoraciones relacionadas con lo que tan sólo pude ver los ojos de una mujer
Ante todo gracias. Conseguiste emocionarme. Así es, pues uno vive sin analizar, la mayoría de las veces, las distintas facetas de su actividad profesional, y menos aun del impacto que puede provocar, en un momento determinado, su actitud, aun teniendo como lema aquello que le fue inculcado desde muy niño, respecto y consideración por los demás.
Cuando te conocí eras una adolescente de firmes convicciones. Me di cuenta de que te gustaba entablar conversación conmigo sobre las distintas obras que le ofrecía a doña Arlete, tu madre, y hasta la inducías en la compra. Si, fuiste una colaboradora asidua en mis gestiones de venta. Ahora es cuando te puedo dar las gracias, pues es cuando tu realmente puedes alcanzar el elevado grado de apoyo que prestaste.
Navegante frustrado no me considero pero si aviador frustrado, por mi daltonismo. Hubiese sido, sin duda, un buen piloto, pero tan sólo pude ser un buen mecánico de a bordo, y hasta que detectaron mi problema. Salía a volar con los pilotos amigos, pero a partir de aquel entonces como pasajero.
Sportinguista desde los ocho años. Aun recuerdo las proezas de los "cinco violinos" "Jesus,Correia, Vasques, Peyroteo, Travaços e Albano".
Afortunado por poseer buenos amigos, y gozar de buena salud, de momento, nada más.
Bohemio, ¡¡¡nooo!!! A no ser que lleves en tu expresión alguna metáfora que desconozco.
Mis colores son: el azul, el gris y en blanco; deportivamente verde y blanco, ¡¡¡siempre!!! como tu...
Cierto, muy amigo de sus verdaderos AMIGOS.
Buenoooo...cabezota no mucho, tenaz si.
Los sportinguistas, somos fieles a nuestros colores, como casi todos los buenos aficionados. Creo que es algo inherente al hombre, es fiel a su equipo, lo que no siempre ocurre en otras facetas de la vida.
Me gusta, ese es el recuerdo que tengo de cuando lo vi por primera vez.
Sus comentarios dan una imagen fiel de su talante.
Sportinguista?
De facto ninguém é perfeito.
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