Hubo un tiempo... ¿recuerdas? su memoria
Vivirá en nuestro pecho eternamente...
Ambos sentimos un cariño ardiente;
El mismo, ¡oh virgen! que me arrastra a ti.
¡Ay! desde el día en que por vez primera
Eterno amor mi labio te ha jurado,
Y pesares mi vida han desgarrado,
Pesares que no puedes tú sufrir;
Desde entonces el triste pensamiento
De tu olvido falaz en mi agonía:
Olvido de un amor todo armonía,
Fugitivo en su yerto corazón.
Y sin embargo, celestial consuelo
Llega a inundar mi espíritu agobiado,
Hoy que tu dulce voz ha despertado
Recuerdos, ¡ay! de un tiempo que pasó.
Aunque jamás tu corazón de hielo
Palpite en mi presencia estremecido,
Me es grato recordar que no has podido
Nunca olvidar nuestro primer amor.
Y si pretendes con tenaz empeño
Seguir indiferente tu camino...
Obedece la voz de tu destino
Que odiarme puedes; olvidarme, no.
Versión de Arturo Rizzi
En su fondo mi alma lleva un tierno secreto
solitario y perdido, que yace reposado;
mas a veces, mi pecho al tuyo respondiendo,
como antes vibra y tiembla de amor, desesperado.
Ardiendo en lenta llama, eterna pero oculta,
hay en su centro a modo de fúnebre velón,
pero su luz parece no haber brillado nunca:
ni alumbra ni combate mi negra situación.
¡No me olvides!... Si un día pasaras por mi tumba,
tu pensamiento un punto reclina en mí, perdido...
La pena que mi pecho no arrostrara, la única,
es pensar que en el tuyo pudiera hallar olvido.
escucha, locas, tímidas, mis últimas palabras
-la virtud a los muertos no niega ese favor-;
dame... cuanto pedí. Dedícame una lágrima,
¡la sola recompensa en pago de tu amor!...
Versión de F. Maristany
Adiós! si dicha se concede al hombre
de una plegaria en premio, ésta tu nombre
elevará hasta el trono del Señor.
Promesas, quejas, llanto, fueran vanos;
más que el lloro, exprimido, ya sangrante,
de ojos sin luz, tenaz remordimiento
esta palabra dice... ¡Adiós! ¡Adiós!
Secos están mis ojos, extinguida
mi voz, pero al dejarte, de mi vida
se adueña para siempre un gran dolor.
Aunque el pesar y la pasión torturan
mi corazón, quejarse no le es dado...
Yo sólo sé que en vano hemos amado...
Sólo puedo sentir... ¡Adiós! adiós.
Versión de Jorge Isaacs
"Cuando el hombre cesa de crear, deja de existir."
"El odio es la demencia del corazón."
LORD BYRON
12 comentarios:
Os poemas são lindos!
Perco algumas palavras, pois não domino a língua...
Beijos de luz e um domingo feliz!!!
o romântico «Lord Byron» do pouco que conheço da sua escrita, também gosto muito!
nem de propósito, sabia que Ele era um eterno apaixonado por Sintra, lá, instalava-se com frequência no "Lawrence`s Hotel" O mais antigo hotel de Portugal... e libertava a sua veia criativa ...
bom fim-de-semana
um sorriso :)
Una belleza de poemas y reflexiones.Realmente un gusto grande
Cariños!
Uno de los grandes, sin duda.
Coincido con Mariam en lo que a su enamoramiento por Sintra, que ele definió como "Paraíso eterno". Algo tiene nuestra tierra, Bueno para los británicos siempre. Mira lo que hicieron con Porto. Menos mal que este se inclinó por lo poético y no nos hizo la vida imposible, nos promocionó...
Abrazos
Gostei de ler, apesar de me escaparem algumas palabras
Saluditos
:))
Quem não gosta de Lord Byron.
O Romântico que escolheu Portugal, (Sintra) para se inspirar...
Saluditos.
Pegando na frase final...
Deixar de acreditar, deixar de ter esperança é sim a morte da alma..
Todos devemos acreditar que somos capazes, que aquilo em que acreditamos poderá ser possivel só assim seremos felizes..
Por vezes levamos as ditas "Chapadas sem mãos" mas pronto... buracos no caminho apenas...
Beijos
ESPANHA CAMPEÃAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
PARABÉNS!
SALUTITOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS
:)
Precioso!!!Da gusto pasar por aqui.Muchas gracias por todas tus palabras...reconfortan.Un beso
"Cuando el hombre cesa de crear, deja de existir"
que gran verdad, y que magníficos poemas nos has traido, Juani
Há, mas que surptresa agradável, adorei esta poesia de Lord Byron, ele não era o máximo? Seu blog é um espetáculo a parte ,amei.beijos
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